
Paso por tus días de primavera y recuerdo lo simple que fuiste, conversábamos cada día de lo que haríamos al día siguiente y teníamos ya planes para el verano. Eran dias rápidos de euforia y libertad a flor de piel, la calma y buenas vibras me rodeaban como amantes de mi ser.
Hoy tus ojos de verano me dicen que no hay piedras en el camino, de vez en cuando caen algunas gotas, pero al día siguiente son olvidadas junto a todo lo que vino con ellas.
Tus ojos de verano me dicen que los planes de primavera no se equivocaban, abarcan la energía del mundo y me abrazan fuertemente... no quieren que tropiece y me aleje de ellos.